Cómo aprender kanji de forma más efectiva
- Antonia Espigares
- 26 feb 2023
- 5 Min. de lectura
Actualizado: 4 may 2023
El kanji es el sistema de escritura del japonés que se utiliza junto con los sistemas hiragana y katakana para escribir el idioma. A pesar de que es posible escribir japonés solo con los silabarios, es sin duda necesario ir introduciendo poco a poco los kanji a medida que los vamos aprendiendo para así conseguir que nuestro japonés sea más natural.
¡No veas lo complicado que resulta leer una frase solo escrita con hiragana!

Aprender kanji puede ser una tarea difícil y desalentadora para muchos estudiantes de japonés.
La friolera de más de 2000 kanjis te esperan si quieres poder leer japonés de manera natural.
Sin embargo, existen varias estrategias que te pueden ayudar a aprender y recordar los kanji de una manera más fácil y efectiva.
En este artículo exploraremos algunas de las mejores maneras de aprender kanji que a mí me han servido y que estoy segura a ti también te van a ayudar. ¡Vamos a por ello!
Aprender los trazos de los kanji y su orden
Los trazos básicos son los movimientos de pincel que se utilizan para escribir cada carácter.
Al igual que en hiragana y katakana, los trazos de los kanji se escriben en un orden determinado.

Existen unas normas bastante genéricas de cómo se escriben que aplica prácticamente a todos los kanji, así que no es una tarea demasiado complicada.
Empezar aprendiendo el orden de trazos no solo te facilitará su escritura, sino que también te ayudará a comprender la estructura de los caracteres y a recordarlos más fácilmente.
Dividir los kanji en componentes
La mayoría de los kanji se componen de varios componentes que a menudo tienen un significado propio. A algunos de estos componentes se les llama radicales y cada kanji tiene un radical o es radical en sí mismo.
El radical se podría decir que es como el componente más importante del kanji, el que representa su significado. Por lo tanto, los kanjis con el mismo radical suelen tener significados muy relacionados.
Por ejemplo, el kanji para "agua” (水) se usa como radical en muchos kanjis, todos ellos relacionados con el significado de agua: como “nadar” (泳), mar (海), puerto (港), etc.
A su vez los componentes que no son el radical suelen dar información acerca de la lectura onyomi (lectura china) del kanji. Con lo que conocer la lectura de componentes comunes a muchos kanji también te facilitará la memorización de las lecturas.
Por lo tanto es una práctica bastante interesante a la hora de memorizar, agrupar los kanjis por sus radicales ya que te permite asociarlos y poder recordar su significado de una manera más sencilla. Y esto nos lleva al tercer punto que es el uso de la mnemotecnia.
Utilizar mnemotécnicas
Las mnemotécnicas son técnicas de memoria que ayudan a recordar información de manera más efectiva. La mnemotecnia más habitual en el caso de los kanjis consistiría en asociar su forma con su significado.

Por ejemplo, el kanji para "montaña" (山) se asemeja a la forma de una montaña. El kanji para "río" (川) se parece a un río con corriente. El kanji para "persona" (人) se compone de dos trazos verticales, que representan las dos piernas. Y cuando le añadimos un trazo horizontal, que representa los brazos abiertos a todo lo ancho (大) significa “grande”.
Si a este kanji le añadimos un trazo vertical que representa el tronco (木), su significado se convierte a “árbol”. ¡Las combinaciones son interminables!
Cuando eres una persona más visual, es decir que sueles recordar las cosas más fácilmente a través de imágenes, puedes utilizar estas similitudes para recordar la forma y el significado de cada carácter.
Aprender los kanji en contexto
No es recomendable memorizar los kanjis de manera aislada. Es decir, uno a uno, sin relacionarlos con otros kanji o con otras palabras.
Al principio del aprendizaje del japonés es inevitable porque todavía disponemos de poco vocabulario y de contextos en los que utilizarlos. De ahí que siempre recomiendo empezar a estudiar kanji en una fase más avanzada del estudio.
La asociación con un contexto no solo te ayudará a recordar los kanjis de manera más fácil sino que a la vez estarás aprendiendo sobre su uso real dentro del lenguaje mientras que a su vez aprendes otros kanjis relacionados.
Todos los kanjis tienen un significado asociado. Sin embargo, muchos de ellos no se usan por sí solos, es decir, siempre forman parte de un “jukugo” (palabra formada por 2 o más kanji). Con lo que recordar el significado aislado de ese kanji no tiene mucho sentido. Es mucho mejor memorizar el “jukugo” ya que aprendes una palabra nueva y a su vez memorizas la lectura del kanji.
Y no olvides de usarlos en tus oraciones siempre que tengas la oportunidad.
¡No hay mejor manera de recordarlos que usándolos!
Utilizar flashcards o tarjetas de memoria
Sin duda, las tarjetas de memoria fueron mi mejor aliado a la hora de aprender kanji.
¡Y todavía las conservo porque son una verdadera obra de arte!
Las recomiendo sobretodo al inicio del aprendizaje del kanji.

Utilizar flashcards tiene dos beneficios asociados.
Primero, te ayudará a entender todos los elementos importantes de los que se componen los kanjis: como lectura “kunyomi” y “onyomi”, significado, radical, orden de trazos, nivel, etc., y ordenarlos de forma visual. ¡Puedes añadir todos los elementos que necesites en tus flashcards para poder recordar mejor el kanji!
El segundo beneficio que te aportan es que el proceso de crear las tarjetas, tanto sea de manera manual como digital, hace que empieces ya a memorizar el kanji y después te sea mucho más fácil recordarlo.
Hay muchos formatos de flashcards. Lo más habitual es que escribas el kanji en una cara de la tarjeta y su significado y lectura en la otra cara, para así luego utilizarlas para ir repasándolas.
Hay varios sitios web y aplicaciones móviles que ofrecen tarjetas de memoria predefinidas para aprender kanji pero yo te recomiendo encarecidamente que crees tus propias tarjetas de memoria si quieres beneficiarte también de la memorización durante el proceso de creación.
Cabe decir que es un proceso que toma su tiempo. Por eso he comentado al inicio de la entrada que es recomendable hacerlo al principio del aprendizaje que es cuando más necesitas asentar las bases del idioma. Una vez que has alcanzado cierto número de kanji deja de tener sentido invertir ese tiempo en la creación de flascards. ¿El número de kanji? Creo que es algo personal y debes valorarlo en función de cuánto te aporte el proceso. ¡Creo que yo debo tener casi 1000 flashcards creadas!
Escribir los kanji a mano
En la sociedad actual, en la que todo está tan digitalizado, este consejo puede parecer algo anticuado.
Sin embargo, existen varios estudios psicológicos que afirman que existe una relación muy fuerte entre el hecho de escribir algo a mano y la asimilación de ese contenido por en el cerebro.

Escribir los kanji a mano no solo te puede ayudar a recordarlos más fácilmente sino a mejorar la escritura en general. Recuerda que estás entrando en el fascinante mundo de un idioma con un alfabeto diferente al occidental. Por lo tanto, tienes que empezar como cuando aprendíamos de pequeños nuestro propio idioma, y es escribiendo a mano una y otra vez los caracteres.
¡Se dice que no has aprendido un kanji hasta que no lo has escrito al menos 100 veces!
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